El piloto astorgano virtual Álvaro Rabanal segundo en la carrera «24 horas solidarios de Monza»

El piloto de carreras virtuales astorgano Álvaro Rabanal, afincado en Italia, ha quedado segundo en la carrera de simulador «24 horas solidarios de Monza», cuya recaudación la donó a la asociación Alzheimer Astorga. ASEMAC también colaboró en las 24 horas, quedándo reflejado su logotipo en el coche virtual.

Rabanal cuenta así su experiencia en las 24 horas:

Está carrera para mí empezó una semana antes sabiendo que venía mi familia a Italia a pasar la Nochebuena conmigo, por lo tanto el entrenamiento mío se quedó reducido a vuelta 30 de entrenamiento. Después el mismo sábado por la mañana la carrera mía no empezaba a las 15 con la calificaión. Ese día a las 7 me tuve que levantar para ir a mi trabajo de diario desde las 8 hasta las 12:30 del mediodía volviendo a casa más o menos a la 13:30. Por suerte mi hermana y mi cuñado me tenían todo preparado (comida, café, etc) por lo que me pude sentar en el simulador. Tras hacer una calificación bastante decente conseguí hacer una séptima posición que para la salida me aseguraba bastante tranquilidad.

Y ahora empezamos con la estrategia de la carrera: la idea mía era cambiar ruedas cada tres skins más o menos, lo que equivale a 2 horas de carrera. En ese momento me podía permitir el ir al servicio sin perder tiempo. Todo como estaba planificado, tuve una salida tranquila, tal vez con demasiada calma llegando a colocarme en posición 14. En ese momento empecé apretar un poco, antes de lo que tenía pensado, y dándome cuenta que tenía muy buen ritmo y que había sido una pena no apretar desde el principio, pero mi intención era mantener el coche lo más intacto posible.

Más o menos a media noche había conseguido remontar desde la decimocuarta posición hasta la tercera posición, por lo que debía continuar apretando y clavando tiempos vuelta tras vuelta contando que yo eran ya 18 horas que estaba despierto. Todo iba bien hasta que en un Sting tuve que ir al baño por fuerza mayor y tuve que cortar el Sting 6 vueltas de gasolina, sabiendo que al final de la carrera me iba a traer problemas. A pesar de todo conseguí adelantar otro puesto y ponerme en segunda posición a menos de 2 minutos de los primeros.

Y ahora llega la parte dura a las 7 de la mañana: tras 24 horas despierto me llegó una crisis muy grande estando en segunda posición teniendo los primeros bastante cerca y a los terceros a más de una vuelta. Yo  veía que no podía mantener el ritmo por no tener reflejos, lo que se puede asimilar a un KO técnico.  Pero gracias a Izan Sierra conseguí sobreponerme. Izan estuvo la segunda parte de la noche conmigo tras Gerardo Pizarro. Es cuando conseguí volver a meterme en tiempos buenos y mantener la segunda posición hasta las 12 de la mañana, cuando volví a bajar el ritmo, notando la parada  que hice 6 vueltas antes de tiempo, lo que me volvió a pasar factura.

Empezó a llegar mucha gente en el programa que tenemos en el ordenador para hablar, quienes me dieron muchos ánimos, entre los que se encuentran gente que hacía años que no veía de San Román de la Vega y de Astorga, además de familia. A falta de una hora para acabar la carrera creía que había ahorrado la gasolina bastante para no tener que hacer una última parada pero tuve que parar ya que no me llegaba por 2 vueltas.

En las últimas vueltas tuve que empezar a apretar ya que el tercero se me acercaba, por lo que me la jugué contando que en este simulador hay una cosa que se llama of trucks:  cada vez que pones una rueda fuera del asfalto te cuenta uno y cada vez que tocas a otro coche se cuentan cuatro. Tras 15 puntos tienes que pasar por boxes como penalización pero como yo había sido un piloto extra limpio era el único que no había tenido que parar hasta ese momento. 

Así que al final con la ayuda de todos conseguí hacer una última hora de infarto rodando más rápido que la primera hora de carrera, por lo que conseguí ganar un poco más de tiempo a los que venían detrás, lo que me permitió hacer una última parada para echar 10 litros de gasolina que me hacían falta para llegar al final me quedaban dos vueltas. La pena fue que este es el tercer año que hago segundo las 24 horas en Monza solidarias.